Tratamiento de la Contractura de Dupuytren: Guía Actualizada de Fisioterapia (2024)

La contractura de Dupuytren es una condición médica caracterizada por la proliferación fibrosa de la aponeurosis palmar, que conduce a nódulos patológicos y contracturas en flexión de los dedos. En este artículo, exploramos las recomendaciones de la guía del 2013 (Ultima actualización), fruto del consenso de expertos en cirugía de la mano, terapeutas y médicos de medicina física y rehabilitación.

Procedimientos No Quirúrgicos y Recomendaciones

La contractura de Dupuytren, una afección progresiva que afecta la palma de la mano, lleva a la formación de nódulos y bandas fibrosas, provocando eventualmente la flexión irreversible de los dedos. Aunque las opciones no quirúrgicas son limitadas, es fundamental para los fisioterapeutas y profesionales de la salud comprender su alcance y aplicabilidad.

Limitaciones de las Inyecciones de Corticosteroides

Históricamente, se han utilizado inyecciones de corticosteroides con la esperanza de reducir la inflamación y ralentizar la progresión de la enfermedad. Sin embargo, la evidencia actual sugiere que estos beneficios son mínimos o inexistentes. Las inyecciones de corticosteroides no solo carecen de eficacia a largo plazo, sino que también pueden presentar efectos secundarios indeseables como el adelgazamiento de la piel o la debilidad de los tejidos locales.

Uso de Colagenasa en la Contractura de Dupuytren

Una alternativa más prometedora es la inyección de colagenasa, una enzima que disuelve el colágeno, el principal componente de los nódulos y cuerdas en la contractura de Dupuytren. Este tratamiento busca romper las bandas fibrosas y mejorar la movilidad de los dedos. Aunque los resultados pueden ser variados y en algunos casos ambiguos, en pacientes seleccionados, la colagenasa ofrece una opción no quirúrgica viable que puede retrasar o evitar la necesidad de cirugía.

Consideraciones Importantes en Tratamientos No Quirúrgicos

Es crucial para los fisioterapeutas evaluar cada caso de manera individualizada, teniendo en cuenta la etapa de la enfermedad, la severidad de la contractura, y las preferencias y necesidades específicas del paciente. Los tratamientos no quirúrgicos pueden ser particularmente útiles en las etapas tempranas de la enfermedad o para pacientes que no son buenos candidatos para procedimientos quirúrgicos.

Procedimientos Quirúrgicos y Rehabilitación

En los casos en que la contractura de Dupuytren avanza hasta el punto en que afecta significativamente la funcionalidad de la mano, se pueden considerar varios procedimientos quirúrgicos. Estos procedimientos buscan liberar la contractura y mejorar la movilidad de los dedos.

Opciones Quirúrgicas Disponibles

Las opciones incluyen la fasciotomía con aguja, donde se utilizan agujas para cortar las bandas fibrosas; la fasciotomía abierta, que implica una incisión más grande y la eliminación del tejido afectado; la fasciotomía limitada, una versión más conservadora de la fasciotomía abierta; y la dermofasciotomía, donde se extirpa tanto el tejido afectado como parte de la piel.

Rehabilitación Postquirúrgica: Un Componente Crítico

La rehabilitación postquirúrgica es un componente crítico para asegurar el éxito a largo plazo de cualquier procedimiento quirúrgico para la contractura de Dupuytren. La rehabilitación comienza inmediatamente después de la cirugía y es esencial para prevenir cicatrices y contracturas recurrentes. Los fisioterapeutas juegan un papel crucial en este proceso, proporcionando terapia manual, ejercicios terapéuticos, y asesoramiento sobre el cuidado de la herida y la gestión del dolor.

Ejercicios Postoperatorios y Uso de Férulas

Los ejercicios postoperatorios son fundamentales y deben incluir una combinación de movimientos pasivos y activos, ejercicios de deslizamiento de tendones y fortalecimiento muscular. El uso de férulas puede ser necesario para algunos pacientes para mantener la extensión de los dedos y evitar nuevas contracturas. La duración y el tipo de férula dependerán de la cirugía realizada y de la respuesta individual del paciente.


Tanto los procedimientos no quirúrgicos como los quirúrgicos juegan un papel vital en el manejo de la contractura de Dupuytren. La elección del tratamiento depende de múltiples factores, incluyendo la severidad de la contractura, las expectativas del paciente y su capacidad para participar en la rehabilitación postquirúrgica. La colaboración entre fisioterapeutas y médicos es esencial para ofrecer un tratamiento integral y personalizado.

Cuidado Postquirúrgico y Ejercicios

El cuidado postquirúrgico en pacientes con contractura de Dupuytren es crucial para asegurar una recuperación óptima y prevenir complicaciones. Este cuidado incluye una serie de pautas y ejercicios específicos diseñados para maximizar la funcionalidad de la mano y minimizar el riesgo de recurrencia.

Evitando la Irritación Mecánica y Manejo del Dolor

Tras la cirugía, es primordial evitar actividades que puedan irritar o ejercer presión sobre la zona operada. El paciente debe recibir instrucciones claras sobre cómo minimizar el dolor y la inflamación. El uso de hielo y medicamentos antiinflamatorios, bajo supervisión médica, puede ser beneficioso en esta etapa.

Importancia de los Ejercicios de Movilidad Básica

Los ejercicios de movilidad básica son fundamentales para mantener la flexibilidad de los dedos y evitar la rigidez. Estos ejercicios deben iniciarse tan pronto como lo permita el dolor y la cicatrización de la herida. Los movimientos suaves y graduales ayudan a mantener la circulación, reducir la hinchazón y facilitar la recuperación del rango de movimiento.

Uso de Férulas Postoperatorias

El uso de férulas postoperatorias puede ser aconsejado por el cirujano, dependiendo de la naturaleza de la cirugía y las características individuales del paciente. Estas férulas ayudan a mantener los dedos en una posición óptima, evitando la recurrencia de contracturas y facilitando la cicatrización. Es vital que el paciente reciba instrucciones claras sobre cómo, cuándo y cuánto tiempo debe usar la férula.

Programa de Ejercicios y Duración

Un programa de ejercicios bien estructurado es esencial para la rehabilitación postquirúrgica de la contractura de Dupuytren. Este programa debe ser personalizado, teniendo en cuenta la extensión de la cirugía y la respuesta individual del paciente.

Objetivos del Programa de Ejercicios

Los principales objetivos del programa de ejercicios incluyen mantener los dedos en extensión para prevenir nuevas contracturas, reducir el edema y restaurar el rango normal de movimiento. Los ejercicios deben ser variados y abarcar movimientos pasivos y activos de los dedos, ejercicios de deslizamiento de tendones y fortalecimiento de los músculos interóseos.

Estructura y Frecuencia del Programa

Se recomienda que el programa de ejercicios se inicie lo antes posible, idealmente dentro de los siete días posteriores a la cirugía. Los ejercicios deben realizarse de tres a cinco veces al día, con sesiones de 15 a 25 minutos. Es crucial no exceder los 80 minutos totales de ejercicio al día para evitar la fatiga y la sobrecarga de los tejidos en recuperación.

Duración del Programa y Criterios de Finalización

La duración recomendada del programa de ejercicios es de tres a ocho semanas. Sin embargo, la duración exacta dependerá de la evolución del paciente y de la evaluación continua por parte de los profesionales de la salud. El programa puede finalizarse cuando se haya alcanzado un rango de movimiento satisfactorio y no exista riesgo de contractura postoperatoria.

Consideraciones Adicionales

Si el programa de ejercicios resulta insuficiente para lograr los objetivos terapéuticos, se puede considerar el uso de una férula adicional. Además, es esencial una evaluación continua para ajustar el programa según la respuesta del paciente y los avances en la recuperación.


El cuidado postquirúrgico y el programa de ejercicios son componentes fundamentales en la recuperación de la contractura de Dupuytren. Una gestión adecuada del dolor, la prevención de la irritación mecánica, ejercicios de movilidad y un programa de ejercicios bien estructurado son claves para una rehabilitación exitosa y la prevención de futuras complicaciones. La personalización del tratamiento y el seguimiento continuo son esenciales para adaptarse a las necesidades y progresos de cada paciente.

Conclusión

La contractura de Dupuytren es una afección compleja que requiere un enfoque de tratamiento multifacético. Las opciones de tratamiento no quirúrgicas, aunque limitadas, deben ser consideradas cuidadosamente en función de las características individuales de cada paciente. En casos más avanzados, los procedimientos quirúrgicos ofrecen una vía para mejorar la movilidad y funcionalidad de la mano.

La rehabilitación postquirúrgica juega un papel vital en el éxito del tratamiento. Un programa de ejercicios bien diseñado y personalizado es esencial para garantizar la recuperación óptima del paciente. Este programa debe enfocarse en mantener la extensión de los dedos, reducir el edema y restaurar el rango de movimiento, siempre bajo la supervisión de un fisioterapeuta.

La colaboración entre profesionales de la salud, incluyendo cirujanos, fisioterapeutas y terapeutas ocupacionales, es fundamental para proporcionar un cuidado integral. Además, la participación activa y el compromiso del paciente con el programa de ejercicios y cuidados postoperatorios son cruciales para una recuperación exitosa.

En resumen, el tratamiento de la contractura de Dupuytren requiere un enfoque personalizado y adaptado a las necesidades específicas de cada paciente. La educación, el asesoramiento y el apoyo continuo son elementos clave para manejar esta condición y mejorar la calidad de vida de los afectados.

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